Algo que me ha ayudado a seguir adelante es aprender cómo funciona mi mente. Saber qué me da miedo, cómo enfrentarlo y cómo hacerlo mi amigo. Identificar que la depresión y ansiedad son en cierta forma mis aliados porque es la manera del cuerpo para avisarme que hay algo que debo atender. He utilizado muchas herramientas para manejar las experiencias que he pasado. Aromaterapia, oración, meditación, yoga, ejercicios, terapia sicológica, medicamentos, hipnosis, en fin… no me doy por vencida.
Todo esto me ha enseñado que las cosas no son blanco o negro, que hay grises entre medio. Haber experimentado todo esto me da la capacidad para entender el sufrimiento ajeno, ser empática conmigo y con los demás.
En este proceso aprendí que fui víctima de violencia doméstica y que a causa de eso tengo trastorno de estrés postraumático o PTSD. No sabía que sobre el abuso sicológico, ni que algunos episodios de agresión física, eran considerados violencia doméstica. Pensaba que eran cosas normales en el matrimonio.
Solo escribiendo sobre esto empiezo a sentir un nudo en la garganta y mi corazón empieza a palpitar más fuerte. Todavía en hipnosis no puedo enfrentar a mi ex esposo porque me da mucho miedo. No sé si algún día pueda liberarme de esto, pero cada día supero diferentes situaciones.
He aprendido a conocerme, saber qué áreas tengo que mejorar y lo más importante es aprender a estar sola. Disfrutar de mi compañía, amarme, respetarme y seguir adelante para lograr todos mis sueños y ser inspiración para otras personas.
-Whatever the mind can conceive and believe, the mind can achieve- Napoleon Hill
HMO